lunes, 5 de octubre de 2009

Liga BBVA Jª 6: Sevilla 2-1 Real Madrid: Vendaval sevillista


Real Madrid y Sevilla ofrecieron un espectáculo de fútbol con el mejor partido de ambos en lo que llevamos de temporada. El Sevilla salió a morder desde el primer minuto mientras los blancos no sabían cómo defenderse. Partido gris de la zaga madridista, que muestra su debilidad a balón parado y enseña a los demás rivales el mayor punto débil de los de Pellegrini. Varios paradones de Casillas evitaron que el partido se finiquitara antes de tiempo.

Ayer todo estaba preparado para ver un gran partido y la cosa no defraudó. Un encuentro clásico ya en el Pizjuán, como todos los años y con el mismo ambiente. La grada volcada con su equipo y los jugadores extramotivados en un duelo que mediría sus fuerzas contra las de uno de los máximos aspirantes al título liguero. Manolo Jiménez apostó por Luis Fabiano y el ex-madridista Negredo como titulares en punta (dejando en la banca a Kanouté) y las bandas las ocuparon Perotti y el jugador estrella en la noche de ayer: Jesus Navas. Por parte del Madrid, Pellegrini optó por el malí Diarra a falta de su homónimo francés e incluyó a Guti en la mediapunta.

Los primeros minutos fueron claramente para los andaluces, que disponían del balón y de ocasiones manifiestas de gol. No obstante, la ocasión más peligrosa la protagonizaría el Real Madrid, que desaprovechó incomprensiblemente Karim Benzema tras un recorte y pase dentro del área de Raúl. Ya en el minuto 33, Fernando Navarro centraba desde la izquierda y el joven Jesús Navas marcaba de cabeza y a placer en un error defensivo de Marcelo. El buen inicio sevillano se veía recompensado.

Sólo un minuto después se armó la bronca del partido. Tanta tensión y nervios tenían que salir por algún lado. Una entrada a Guti supuso el principio de la disputa, ya que Zokora le recriminó a éste el haber fingido. Perotti olvidó el gran partido que estaba haciendo y se pudo meter en un buen lío si Iturralde González llega a ver el feo golpe en la espalda que le propinó el argentino a Guti. Todo se solucionó como acostumbran los colegiados cuando no saben que ha sucedido: amarilla para los implicados Guti, Zokora y Perotti. Aún quedó tiempo para una ocasión de Xabi Alonso, otra de cabeza de Luis Fabiano y una de las dos grandes intervenciones de Casillas anoche. Centro al área de Perotti que remata a bocajarro Renato otra vez libre de marca y que el de Móstoles salva milagrosamente con la pierna derecha. Llegaba el descanso y el final de la agonía de Marcelo, al menos durante 15 minutos, ya que se vio desbordado por Navas una y otra vez a lo largo del encuentro. El club blanco se fue a los vestuarios con la sensación de sentirse afortunado por recibir un único gol.

Con el inicio de la segunda parte no cambió mucho la cosa y el público asistió a la segunda y última gran parada del portero visitante. Tras una buena jugada de Negredo por la derecha, puso un balón raso rematado por Perotti, que hizo al portero madridista estirarse al máximo y evitar un gol ya cantado en las gradas. Y cómo son las cosas en el fútbol, que en la siguiente jugada (min. 49) Pepe remató de cabeza un centro de Guti que se fue dentro de las mallas y ponía las tablas en el marcador. A partir de ahí el partido cambió y los merengues pasaron a dominar más el encuentro mientras que los sevillanos esperaban titubeantes. La entrada de Higuaín por Benzema daba algo de aire fresco al equipo, a pesar de que el sustituído debió ser Raúl, ausente casi todo el partido. Justo cuando mejor iban las cosas para los de Pellegrini, Renato hizo el segundo en el 67 rematando por enésima vez sin oposición visitante. El monumental cabreo de Casillas no sirvió para nada, que vio como se rompía el partido y cómo poco a poco el Sevilla intentaba dar carpetazo al encuentro si culminaba alguna de las múltiples contras de las que dispusieron.

Pero el marcador no se movió más, incluso el Real Madrid tuvo la última ocasión del partido, pero no la convirtió en gol, quizás porque no lo merecía. Los sevillanos presentan ya su candidatura al título.

El mejor del partido: Jesús Navas, que fue un puñal por la banda derecha. Destacar, fuera de ésto, el buen partido del malí Diarra, que regresaba al once titular después de su grave lesión y que no mostró señal alguna de falta de ritmo de partidos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario